El viernes empezaron los Juegos Olímpicos de Londres 2012 con una ceremonia inaugural en la que lo que más me gustó fue el homenaje de Mr. Bean a Carros de fuego y que fue más entretenida que de costumbre. Sólo hay que ver lo bien que se lo pasó la Reina Isabel:
Como cada cuatro años, se presentan dos intensas semanas de sillonball. Hace cuatro años recordé los primeros Juegos Olímpicos que seguí y que fueron los de Los Ángeles 84. Y recientemente viendo el documental 16 días de gloria, rodado en aquellos días, me he dado cuenta de que recuerdo con más claridad a Carl Lewis, Mary Lou Retton, Michael Gross, Daley Thompson, Greg Louganis, Sebastian Coe o Maricica Puica y aquel mítico 3.000 con Zola Budd y Mary Decker, que a la mayoría de campeones olímpicos más recientes.
Eran otros tiempos y el bronce de José Manuel Abascal en el 1.500 o la plata en baloncesto ante Michael Jordan y compañía, eran celebrados como grandes victorias para un país en el que los éxitos brillaban por su ausencia.
Me acuerdo tan bien de Los Ángeles gracias a las cintas de vídeo que todavía guardo, ya muy desgastadas de tanto ponerlas. La joya de la corona de esas cintas es una en la que tengo grabada la final de baloncesto. Inserto el vídeo para viejunos nostálgicos como yo y para los que aún no la hayan visto y quieran ver uno de los momentos históricos del deporte español:
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